“… a fin de perfeccionar a los santos para la obra del
ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,...” (Ef. 4: 12)
La
semana que pasó, una vez más, tuve la oportunidad de dictar el primer curso de capacitación:
“MÉTODOS DE ESTUDIO BÍBLICO Y REGLAS DE INTERPRETACIÓN”, en la ciudad de
Desaguadero. Nunca antes había viajado a estas tierras a pesar de estar
relativamente cerca del Cusco. No conocía personalmente la realidad espiritual
de la gente de esta región.
Como
todos saben, Puno es conocido por dos cosas: el Titicaca, lago navegable más
alto del mundo y la fiesta idolátrica de la Virgen de la Candelaria. Puno, como
todo el Perú, es un lugar muy religioso. La gente trabaja durante todo el año
con motivo de hacer un derroche en honor a su ídolo adorado. La perdición en
torno a este ídolo es detestable. En medio de todo este paganismo, Dios ha
levantado su iglesia. Una iglesia que tiene que batallar no solo con la idolatría
del mundo sino también con la contaminación de la sana doctrina.
Los
pastores y líderes que estuvieron en este curso me informaron, y me hicieron
preguntas al respecto, que un gran número de pastores y líderes de las Iglesias
de esta región no aman la verdadera predicación de la Palabra. Es lamentable
que durante las comuniones, convenciones, congresos y campamentos, se prefiera
a un “predicador” que más bien les entretenga y no les predique la sana
doctrina. Es triste saber que a los pastores que predican la Palabra, les
cortan el tiempo de su predicación limitándolos a 20 minutos; en cambio a
quienes pasan su tiempo contando chistes,
anécdotas y experiencias diversas, les dejan todo el tiempo que quieran
sobre el púlpito. No pueden sufrir la verdadera predicación.
Esta
realidad espiritual demanda siervos preparados en el conocimiento de la Palabra
para corregir lo deficiente. Los cursos de capacitación que se brindará en esta
zona significarán cubrir una necesidad apremiante. El ministerio EPYL tiene en esta región un
gran campo de labor. Necesitamos la ayuda del Señor para esta gran tarea.
Necesitamos de las oraciones y el apoyo de todos aquellos quienes sienten el
peso de la predicación del verdadero Evangelio.
1. La asistencia:
Los
asistentes al curso fueron 29 personas,
de los cuales: 5 fueron pastores y 24 líderes.
Destacamos
que la mayoría de los asistentes a este curso fueron miembros de la Iglesia
Alfa y Omega.
2. El dictado del curso en sí:
El
horario:
El dictado
del curso duró 6 días:
Lunes
a jueves: mañanas de 8am a 12:30pm, tardes de 2: 00pm a 6:00pm.
Sábado
de 8am. a 2 pm. y Domingo
de 3 a 6 pm.
De los alumnos:
· En el grupo se pudo
distinguir a quienes saben leer medianamente bien y quienes leen con
deficiencia.
·
La gran mayoría
necesita mejorar su comprensión lectora.
·
El nivel académico de
los alumnos es de regular para abajo.
·
La mayoría de los
alumnos posee escaso conocimiento bíblico: solo dos personas leyeron toda la
Biblia.
Respecto del curso en sí:
El
curso se desarrolló de forma dinámica: los asistentes participaron con
preguntas, aportes y diferentes opiniones.
El
curso fue una novedad para la mayoría de los asistentes.
Los
alumnos disfrutaron con mucho interés las enseñanzas.
El
Señor, a pesar de nuestras limitaciones, hizo de este curso muy provechoso.
3. El ambiente y la comida:
·
Las hermanas se
encargaron, por turnos, de preparar la comida: desayuno almuerzo y cena.
·
La comida fue típica,
abundante y rica.
·
El ambiente, durante la
semana, fue muy amistoso y edificante.
·
Hubieron 3 noches de
recreación en el Wali (campos deportivos de vóley)
·
En general, fue una
semana de edificación y de estrechar lazos de amistad entre hermanos.
4. Los resultados:
Los
hermanos, asumieron el reto de leer toda la Biblia.
Reconocieron
su falta de estudio metódico en el estudio de las Escrituras.
Se
dieron cuenta de su deficiencia en la predicación de la Palabra.
Valoraron
la labor de los pastores y maestros en
la preparación de sus mensajes: el tiempo y dificultad que esto significa.
Los
29 alumnos están decididos a estudiar los 9 cursos restantes.
Por
mi parte, cada vez aprendo más a adecuar el curso según el nivel, la demanda y
realidad de cada grupo.
5. Necesidades y motivos de oración:
·
Existen iglesias, en
las comunidades que están a los alrededores de Desaguadero, que necesitan el
apoyo de obreros que lleven buena predicación y enseñanza.
·
La Iglesia Bautista
Alfa y Omega (lugar donde se dio la capacitación) está enviando obreros a iglesias
que están a los alrededores de Desaguadero (2 horas a más de camino). Oremos
para que se incremente el número y el Señor les brinde el recurso y la
sabiduría necesaria para este trabajo.
·
Necesitamos trabajar con
el objetivo que esta Iglesia, que está en el mismo Desaguadero, se convierta en
un centro de capacitación de obreros con sana
doctrina y puedan ser un medio para corregir lo deficiente en las
iglesias de la región.
·
La iglesia Bautista
Alfa y Omega, es considerada por la unión de iglesias de la región como una
Iglesia muy correcta, oremos para que esta iglesia mantenga su testimonio y no
se contamine con mala doctrina.
·
Según el testimonio de
los hermanos, gran parte de la contaminación doctrinal viene del lado boliviano
de las iglesias. En el ministerio EPYL estamos considerando extender nuestro
ministerio hasta ese país. Oremos por provisión y contactos.
·
Oremos por la salvación
de toda la región sur del Perú, para que el Señor saque de la idolatría a la
gente de estos pueblos.
·
Necesitamos mucha
sabiduría para la obra, ser guardados
por el Señor y que nos siga proveyendo los recursos para seguir adelante con este
trabajo.
·
Oren por mí, y por cada
uno de los maestros de EPYL, para que el Señor nos guíe y siga utilizando en
este ministerio.
6. Gratitud
Agradezco
a Dios, nuestro Salvador, por darme el privilegio de ser útil y colaborar en su
obra. A él sea la Gloria.
Gracias
al Equipo EPYL, por, una vez más, darme su confianza y apoyo para esta labor.
Gracias
al pastor Ascencio, que hizo todos los preparativos para que se llevara a cabo
este curso.
Gracias
a cada uno de los hermanos de la Iglesia Alfa y Omega, de Desaguadero, por su
hospitalidad, el cariño y aprecio que me brindaron durante toda la semana.
Gracias
a las hermanas de la iglesia, por cocinar rico y bastante.
Gracias
a la iglesia por su ofrenda para el ministerio EPYL.
De
manera especial, agradezco al hermano Jaime y a su esposa Martha, por
proveernos el viaje de paseo a la Ciudad de la Paz, Bolivia.
Gracias
al Señor por haberme permitido visitar las ruinas de Tiahuanaco junto con la
hermana Noemí y Juan.
Gracias
a Dios, una vez más, porque ya se establecieron fechas para los próximos
cursos.
A DIOS SEA LA GLORIA POR TODO LO QUE VIENE HACIENDO
Y HARÁ POR NOSOTROS.
Dios los bendiga.
En su amor
Enrique Hanco C.
Ministerio EPYL Iglesia Bautista Ven-id